Según los datos oficiales, España es uno de los países más viejos del mundo. Pero este dato nos permite realizar una pequeña reflexión: ¿A qué edad me hago mayor? ¿Cuándo entra la vejez de manera real? Estamos ante una cuestión que no tiene una respuesta objetiva universal, aunque sí que se pueden realizar diferentes valoraciones.
Se estima que en nuestro país hay más de 8,5 millones de personas mayores, lo que supone casi el 20% de su población total. Para este cálculo, se pone como límite los 65 años. Pero, ¿podemos afirmar que una persona es vieja a partir de esa edad? Realmente no. Suele utilizarse ese parámetro por una simple comodidad estadística, un umbral conocido y que coincida con la edad de jubilación. Nada más.
De hecho, si algo se puede afirmar en los últimos tiempos es que nuestra sociedad le ha ido ganando terreno a la vejez, a la esperanza y a la calidad de vida. Una persona de 65 años que viva actualmente no tiene nada que ver con una de hace medio siglo. Los avances en medicina y en conquistas sociales nos permite mejorar mucho nuestra salud y nuestro estado general, sobre todo en comparación con generaciones anteriores.
Entonces, ¿a qué edad me hago mayor? Como siempre se comenta en estos casos, y a riesgo de caer en frases hechas, la edad es un estado mental. Hay personas que con 75 años cuentan con una vitalidad sorprendente y otras que con 60 no alcanzan los mismos niveles de actividad o de salud. Todo depende de la actitud que cada uno tenga ante la vida.
No podemos olvidar otro aspecto importante y es que en la sociedad actual se ha ido dilatando mucho la adolescencia y la primera adultez, por lo que necesariamente también hay que retrasar la entrada de la vejez.
Para terminar, hay que dejar claro que, como en otros aspectos de la vida, “el hábito hace al monje”. ¿Qué quiere decir esto? Simplemente que si nos esmeramos en sentirnos jóvenes y vitales, si nos empeñamos en no caer en las garras del sedentarismo, conseguiremos alargar nuestra juventud lo máximo posible, tanto a nivel físico como psicológico o emocional.
